Un paseo chamanico por el bosque otoñal: tambor, cantar, respirar y meditar

Un paseo chamanico por el bosque otoñal

Soy mami entregada de mi niña de casi 9 meses. Lo soy con todo mi ser y me encanta tenerla conmigo…siempre. Solo hay unas horas al fin de semana que se queda con su papi, y los dos me regalan tiempo para mí. ¡Gracias!

¡Necesito respirar y conectarme con la Tierra!

Hoy tengo ganas de aprovechar ese tiempo para pasear con mi tambor chamanico por el bosque otoñal, dejando en abierto los detalles de mi escapada.

Cojo mí chaqueta, mi tambor y el móvil, con la idea de solo utilizarlo para saber si está todo bien con mi bebé. Y empiezo a caminar, y a respirar hondo. Busco localizar mi atención en mi corazón. Y dejo volar suavemente la maza hacia el tambor “pum – pum – pum”. Su sonido es mágico para mí. ¡Que ganas de cantar!

Madre te siento bajo mis pies
Siento tu corazón latir!
Heya heya heya heya
Heya heya ho
Heya heya heya heya
Heeeeyaaa hoooo

Me siento animada y en conexión con la Tierra. Pronto me quedo sin aire, paro de cantar, miro adelante y me doy cuenta que todo el camino está lleno de margaritas y flores de diente de león.

¡Que precioso!

Camino un poco más y me adentro al bosque. Las setas que han salido después de la lluvia pintan los paisajes de perfección. Parece que me tenga que encontrar con duendes u otros seres mágicos a cualquier momento.

Una pequeña meditación

He encontrado un lugar que me invita a sentar. Mi intención es meditar un poco.

Me siento, respiro.

Me invaden mis miedos y las voces de mi ego. Sé que estáis aquí, sois parte de mí.

Me concentro en mi corazón, donde reside mi ser, para no perderme en el miedo. Y desde aquí lo miro, respiro y lo acepto. Se diluye…

A las voces las dejo hablar, focalizando mi atención en mi sentir (es con mi atención que decido que parte mía se engrandece).
No soy maestra en estas prácticas, justo estoy aprendiendo a coger el timón de mi barco. ¡Y hoy estoy contenta porque lo estoy haciendo!

Como a medio paseo me ha venido la inspiración de hacer de este mi primer post, aprovecho para grabar la meditación con el móvil. La repito algunas veces, para corregir algunas cosas y esto me da tiempo para sentirme bien conectada.

Empiezo una meditación sencilla y para mi muy efectiva, de reconexión con la Tierra, el Sol, el Aire i el Agua.

… Siento la Tierra en mí y a mí en la Tierra…

Esta meditación me ayuda a sentir la magia que me une a todo, y traspasar las fronteras impuestas por el miedo.
Si te apetece probarla, puedes ver la meditación completa aquí.

Un rezo original

Me vienen ganas de tocar el tambor chamanico y los cánticos improvisados salen solos, con los ojos cerrados, la mente en trance…

 Tambor, tambor mío
ayúdame a abrir mi corazón
ayúdame eieiei tambor mío eieiei…

Esa es la intención que puse al crear mi tambor, que me ayude a abrir mi corazón, cerrado por el miedo…
La canción continua, y voy ubicando el tambor en diferentes partes de mi cuerpo – corazón, plexo solar, vientre, frente, cabeza – en modo de sanación intuitiva.

“ Apacigua mi vientre, serena mi mente…”

Y todo lo que siento decir inspirada por los ritmos cambiantes del tambor. Para mí es un rezo, en lenguaje original. Me siento en la vida, llena.

Poco a poco se calma el tambor, la voz se escurre entre los árboles. Solo respiro. Y atravesando la calma le pregunto al viento:

¿Que es mi propósito de vida?

Y alguien me contesta. No sé si la respuesta viene de fuera, o de dentro de mí, pero ese momento vuelvo a sentir mi pasión. Lo que me hace vibrar, y que la vida brille:

Comunicarme con todos los seres, desde el corazón, jugando y disfrutando de la vida.

Tan simple. Y tan grande… Y así ser un ejemplo que inspira a otras a abrir el corazón, y contribuir a que el mundo se incline al camino del amor… pero eso ya son añadidos de mi mente.

No sé cuánto tiempo ha pasado, pero siento que tengo que volver con mi hija. Doy las gracias al lugar que me ha acogido durante estos instantes y me voy pitando.

¿Y tu mami? ¿Que haces es tu tiempo libre? ¿Tienes tiempo para ti? Explícame tus paseos por el bosque 🙂

 

Deja una respuesta